SANTO DOMINGO. La propuesta de reforma fiscal planteada por el gobierno tendrá efectos negativos para los nuevos compradores de viviendas y eleva el costo de los materiales de la construcción.Esa reforma, si se aprueba como está contenida en el plan de reforma fiscal, daría al traste con el plan inicial del gobierno que prometió para los próximos cuatro años la construcción de 100 mil unidades habitaciones.
De las 100 mil casas, ya fue anunciada la construcción inmediata por parte del sector privado de 8,196 viviendas de bajo costo, que oscilarán entre RD$700,000 y RD$2.3 millones, para ser adquiridas por familias de ingresos reducidos, bajo la Ley 189-11 de Fideicomiso y Promoción de Mercado Inmobiliario.
Esta ley dispone exención fiscal para compradores en que los proyectos sean desarrollados dentro de sus alcances y estarán exonerados de todo tipo de gravámenes, impuestos y arbitrios, como medio de reducir los costos para las familias interesadas.
Sin embargo, con la nueva reforma fiscal, se modifica la ley 18-88 para establecer un impuesto anual sobre el patrimonio de carácter directo y de naturaleza personal que grava con un 1% el patrimonio inmobiliario total de las personas físicas.
Ahora, si una persona tiene una casa que vale RD$6 millones, pagará el 1% después de los 5 millones, pero si tiene 3 casas de 3 millones no paga si se aprueba la reforma. Al sumar las tres viviendas como una, pagará el 1% sobre los 4 millones restantes.
José Rodríguez Cáceres, fundador de la Asociación de Constructores y Promotores de Vivienda (Acoprovi), dijo que eso no es una reforma, sino buscar dinero para gastar más.
Entiende que el gobierno tiene una oportunidad de arreglar las cuentas y hacer una verdadera reforma fiscal en la que no se pueda violar el presupuesto y la ley que afecte a la economía y a los más pobres. Expuso que se debe gastar en las cosas necesarias y el gobierno es quien debe dar el ejemplo, y si hay déficit es porque se gasta más de lo que entra.
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