Estas damas han comenzado por tintar los vidrios de sus carros, comprar gas pimienta, pistolas paralizadoras, colocar sus seguros y hasta portar algunas armas de fuego.
La señora Patricia Soto sostiene que ya una vez fue víctima de los delincuentes. Dice que su esposo le regaló un carro en diciembre del año pasado y que el día de La Altagracia de este año, dos hombres a punta de pistola se lo quitaron a la una de la tarde cuando retornaba a su casa después de visitar a su madre en el sector Alma Rosa ll en Santo Domingo Este.
Narró a Diario Libre que después de esa experiencia decidió comprarse un arma, sacarle permiso legal y aprender a tirar con ella, “porque te juro que no me volverá a pasar”.
Doña Patricia se queja de que los medios de comunicación no le han dado la verdadera cobertura a los casos de delincuencia en el país. “Pero a veces pienso que es mejor así, porque nos estaríamos volviendo locos”, dijo.
Doña Brunilda López es una señora de 62 años, maneja su propio carro y ayer en la mañana acudió a una tienda que vende objetos variados en Plaza Naco y compró gas pimienta.
¿Doña, y para qué usted compra eso?, “Mi hijo para hacerle shi, shi, shi, a los delincuentes cuando vengan a atracarme porque creen que soy una vieja”, aseveró.
En estos mismos términos se expresó la joven ingeniera Mildred Portes, quien alega que anda conduciendo por las calles con temor a convertirse en una víctima más de los delincuentes y por esa razón anda “artillada” con una pistola paralizadora y con suficiente gas pimienta para enfrentar a los delincuentes que se le acerquen.
“La semana pasada fui con mi novio y tinté los vidrios de mi yipeta, ando con los seguros puestos y compré estas dos cosas que usted ve ahí”, expresó.
Asimismo, estas damas hicieron un llamado al Jefe de la Policía, mayor general José Armando Polanco Gómez para que aumente el patrullaje en todo el Polígono Central del Distrito Nacional, “y así no tendremos que armarnos todas”, dijo doña Brunilda López.
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